El reciente fallecimiento de Rubby Pérez, conocido como «La voz más alta del merengue», ha dejado un vacío en la escena musical latina y ha generado un profundo pesar entre sus seguidores. Con una carrera que abarca más de cuatro décadas, Rubby Pérez se consolidó como una figura icónica del merengue, dejando un legado artístico y económico que será recordado por generaciones.
Su incorporación a la orquesta de Wilfrido Vargas en 1980 marcó un punto de inflexión en su carrera, ya que su salario se duplicó y su voz se convirtió en un elemento clave para popularizar temas como «El africano» y «Volveré». Esta etapa catapultó a Rubby Pérez a la fama y lo posicionó como una figura destacada en el género del merengue. Posteriormente, inició su carrera como solista en 1987, logrando éxitos que entraron en las listas de Billboard y consolidándose como una figura clave del merengue.
Aunque la información detallada sobre sus ingresos y fortuna personal no es de dominio público, se estima que su patrimonio neto rondaba los 5 millones de dólares en 2022, según la página afamous. Sin embargo, Rubby Pérez siempre mantuvo reservada la información sobre sus bienes personales.
Un indicio de su capacidad económica se evidenció en eventos familiares, como la celebración de los quinceaños de una de sus hijas, donde el pastel fue considerado el más grande y costoso del país, con un costo de 600 mil pesos dominicanos.
Rubby Pérez fue padre de siete hijos, entre ellos Zulinka Pérez, quien heredó su pasión por la música y formaba parte del coro de su agrupación. Tras su muerte, este legado patrimonial seguramente será dividido entre sus hijos, quienes han sido muy unidos a lo largo de los años.
Su hija Zulinka estuvo presente en la fatídica noche del accidente en la discoteca Jet Set y logró escapar con vida, narrando los momentos de terror vividos durante el colapso del techo.
«Todo colapsó, se puso oscuro. Mi esposo, quien es corista, se lanzó encima de mí y me dijo: ‘Mami, sal para que el niño no se quede solo si esto se cae por completo’», relató Zulinka Pérez en declaraciones a la prensa. Esta tragedia ha dejado un impacto profundo en la familia y en la comunidad musical, que ahora se une para rendir homenaje a la memoria de Rubby Pérez.
Su mánager, Enrique Paulino, confirmó su fallecimiento tras el colapso del techo de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, donde ofrecía una presentación en vivo. «Estamos esperando que los hijos se pongan de acuerdo para el funeral», añadió Paulino en declaraciones a la agencia de noticias AFP. La muerte de Rubby Pérez ha generado un duelo nacional en República Dominicana, con el presidente Luis Abinader decretando tres días de luto por las víctimas del trágico incidente.
En resumen, Rubby Pérez dejó un legado artístico y económico que será recordado por su contribución al merengue y su capacidad para generar un impacto significativo en la industria musical. Su fortuna, aunque no revelada en detalle, es un testimonio de su éxito y dedicación a su carrera.