La madrugada del martes 8 de abril de 2025, la discoteca Jet Set en Santo Domingo, República Dominicana, fue escenario de una tragedia que conmocionó al mundo del entretenimiento. Durante un concierto del legendario cantante dominicano Rubby Pérez, el techo del establecimiento se derrumbó, cobrando la vida de varias personas, incluyendo al propio artista.
Rubby Pérez, conocido como «La voz más alta del merengue», tenía 69 años y era uno de los iconos más destacados de la música dominicana.
La confirmación de su muerte llegó horas después del incidente, cuando su mánager, Enriquito Paulino, informó a los medios que Pérez había fallecido. «Tristemente les tenemos que informar que el merenguero Rubby Pérez ha fallecido. Esta es otra de las víctimas fatales del desplome del techo de la discoteca Jet Set», dijo Jessica Carrillo en el programa «Al Rojo Vivo» de Telemundo.
El colapso del techo ocurrió mientras Rubby Pérez interpretaba uno de sus temas más populares ante una audiencia de cientos de personas. A pesar de las esperanzas iniciales de encontrarlo con vida entre los escombros, las autoridades finalmente confirmaron su deceso. «Hemos confirmado la recuperación del cadáver del merenguero Rubby Pérez. Su familia que se encontraba precisamente en esta área recibió la noticia por parte de las autoridades», informó la periodista Alicia Ortega en el noticiero dominicano ‘Noticias SIN’.
Rubby Pérez, cuyo nombre completo era Roberto Antonio Pérez Herrera, nació el 8 de marzo de 1956 en Haina. Fue un artista emblemático de la época dorada del merengue en los años 80 y fue reconocido recientemente durante la edición 40 de los Premios Soberano, celebrados en el Teatro Nacional Eduardo Brito el pasado 25 de marzo.
La tragedia también cobró la vida de otros famosos, como el diseñador Martín Polanco y el DJ Felito Musci, entre otros. El presidente Luis Abinader se acercó al lugar para ofrecer apoyo moral a los sobrevivientes y familiares de las víctimas.
En un giro trágico pero conmovedor, la hija de Rubby Pérez, Zulinka, reveló que su padre le salvó la vida al pedirle que se quedara detrás de él en el escenario justo antes del colapso. «Si yo hubiese estado en el micrófono de mi papá, yo no hubiese estado aquí ahora», compartió Zulinka en una entrevista.
La muerte de Rubby Pérez ha dejado un vacío en la escena musical dominicana y ha generado un impacto profundo en sus seguidores y en la comunidad artística en general. Su legado como uno de los más grandes exponentes del merengue seguirá vivo a través de su música y el recuerdo de su voz poderosa.